Los próximos años traerán grandes oportunidades de negocio en todo aquello relacionado con el desarrollo del Internet of Things (IoT) o el Internet de las cosas, son varios los estudios que así lo apuntan. La manera de relacionarnos no solo con las empresas, sino con utensilios y productos de uso diario en nuestras vidas, cambiará drásticamente, de hecho ya ha empezado a hacerlo. Sobre todo ello se habla en uno de los últimos post del blog de Unísono.
“Ya no es lejano pensar en unas zapatillas capaces de registrar datos como por ejemplo el tiempo y la distancia recorrida, o en un refrigerador que de acuerdo con lo que se pone en su interior y se va desocupando, sea capaz de hacer una lista con los alimentos que faltan por comprar. Nada de eso es ficción, es ya el presente.
Cuando apareció por primera vez el término “Internet de las Cosas” en 1999, muchos pensaban que era solo una palabra de moda y un reto que se planteaba para el futuro, como para 2015 o 2020. Pero la tecnología avanza a pasos agigantados y ahora aquí estamos, con el 2015 en el retrovisor y con una visión cada vez más clara de 2020”.
(El post completo se puede leer aquí).