Motivar y retener en un entorno de trabajo como el contact center donde el desgaste es intenso, requiere de cierta estimulación adicional para tratar de que la actividad no se haga tan monótona y por tanto, el agente no piense en abandonar. Se recomienda que si el índice de rotación es mayor al 4%, se tomen cartas en el asunto. Una manera de hacerlo puede ser recurriendo a la tecnología que facilita ciertas tareas para motivar y retener el talento. Desde el blog de Enghouse Interactive dan algunas claves a tener en cuenta.
Estos 3 consejos serían, a su modo de ver, los principales a tener presentes:
1. Coordinar bien los tiempos de trabajo. El horario de los agentes es también motivo de rotación de personal, por ello es necesario contar con una planificación que coordine todos los instrumentos de la corporación para que funcionen de manera eficiente. En este sentido, una herramienta de WFM (Workforce Management) puede ser de gran ayuda, ya que permite planificar los recursos y prever con precisión la demanda y generar horarios instantáneos optimizados para ofrecer los más altos niveles de servicio a los clientes, mejorando, además, la experiencia de los agentes.
2. Introducir la gamificación como elemento dinamizador. La gamificación es una técnica que puede mejorar la productividad al hacer que el trabajo sea más agradable, divertido y gratificante. Es, por tanto, una buena manera de motivar y retener a los empleados del sector que sean.
Enghouse ofrece juegos para para empresas en los que la combinación del storytelling y la tecnología permite construir un vínculo emocional entre las tareas y sus ejecutores a través de las partidas.
3. Dinamizar la manera de ofrecer conocimiento. Impartir formación no tiene que ser algo aburrido, al contrario, puede ser divertido si se hace de forma dinámica. Existen varias formas. Se trata de motivar a los agentes mientras estos aprenden más y mejor. Esto a su ves, permite ofrecerles ascensos en la medida que se vayan presentando vacantes para ello.
(El artículo completo se puede leer aquí, en el blog de Enghouse).