Dadas las circunstancias actuales, que han llevado a una degradación de los indicadores operativos, a partir del martes 17, los clientes de Teletech han tomado la decisión de cortar y suprimir el servicio de atención de llamadas que llevaba a cabo esta compañía.
Asimismo, la firma ha aclarado que no trasladará a Costa Rica ningún servicio o contrato (en su página web se había anunciado la contratación de 1.200 agentes en aquel país) y que, a partir del 31 de julio, no habrá trabajo definitivamente, por lo que resulta «fundamental» continuar negociando para resolver la situación.
La compañía ha señalado que, si bien en el ejercicio 2011 obtuvo un «mínimo beneficio» de 50.000 euros tras un «profundo» ajustes de gastos, en el ejercicio 2009 sufrió unas pérdidas de 0,9 millones de euros, que se acentuaron hasta los 8,1 millones de euros en 2010.
La dirección de Teletech ha solicitado «calma» a sus empleados en favor del diálogo necesario para iniciar el proceso de negociación desde la colaboración y el entendimiento. «La compañía desaprueba cualquier postura de fuerza que solo puede enturbiar el clima de negociación en busca de la mejor solución para todas las partes implicadas en el proceso«, ha indicado la firma.
Teletech presentó el lunes de esta semana ante la Autoridad Laboral el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción de los contratos fijos y ha comunicado el fin de obra al resto de trabajadores de sus cuatro centros en España, con una plantilla compuesta por unos 1.500 empleados.
En defensa de sus puestos de trabajo
Los agentes de la plataforma de Toledo, que en su mayoría prestaban servicio a Vodafone, piden a esta compañía que se haga cargo de este centro de llamadas, para evitar así 650 despidos.
Representantes de CCOO, UGT y CSIF, acompañados de 150 trabajadores, han explicado en una rueda de prensa que es la única alternativa que les queda para que las administraciones “tomen parte” en este conflicto laboral. “Vodafone no va a mover ni un dedo si alguien con poder no se implica en este asunto”, ha afirmado el responsable estatal de CCOO de la empresa y presidente del Comité de Empresa de Toledo, Álvaro Gómez.
Este representante sindical ha anunciado jornadas de huelga para los días 20, 23 y 24 de julio, así como una marcha desde las puertas del centro hasta la plaza de Zocodover (Toledo).
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha mostrado su «enorme preocupación» por esta «ruptura industrial, empresarial, muy traumática» y ha advertido de que «no se puede perder ni un minuto de tiempo«. «Ya están perdiendo el tiempo quienes tienen responsabilidades para implicarse, y esta implicación debe ser al máximo nivel», ha subrayado García-Page, que ha pedido a la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, que se implique personalmente en este asunto.
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