Desde On Soluciones nos aleccionan un poco más sobre cuáles son las buenas prácticas a tener en cuenta a la hora de que una empresa se enfrente a un proceso de licitación. Si hace unas semanas, en su blog escribían sobre la metodología formal, en esta ocasión añaden interesantes consejos fruto de la experiencia acumulada.
En la recogida de estás buenas prácticas, se han de tener en cuenta algunos puntos esenciales en los que se debe poner un cuidado especial a la hora de enfrentarse a un proceso de licitación. Dichos puntos, aquellos que On Soluciones desarrolla en su post, son los siguientes: Request for Information (RFI), acotación del espacio y formato para las respuestas, escenarios de negocio, modelo de relación, gestión de dudas y equipo evaluador.
Sobre el primero de estos elementos, el Request for Information, apuntan los siguiente en el artículo:
«El proceso de preselección es delicado. Hay que garantizar que se invita a los proveedores adecuados y que no se deja a ninguno por el camino. Para evitar subjetividades, recomendamos establecer un proceso formal de Petición de Información (Request for Information) que ayude en la preselección. En dicho proceso es conveniente disponer de una matriz previa de valoración de los atributos que buscamos en el proveedor, además de contar con varias opiniones dentro de un comité evaluador.
Por ejemplo, si buscamos solvencia empresarial, presencia internacional, equipo de soporte local, casos de éxito similares o alguna capacidad concreta, detallémoslo en la petición de información. El comité evaluador ponderará esos atributos iniciales y permitirá saber quiénes son los proveedores solventes para pedir ofertas formales«.
(El artículo se puede leer commpleto ).